Los principales factores que determinan el éxito de una terapia antirretroviral para tratar el VIH son tres: eficacia, seguridad, y adherencia. Para garantizar estos tres factores, han surgido nuevas tendencias en las soluciones terapéuticas usadas para hacerle frente a la enfermedad. Las terapias antirretrovirales son soluciones terapéuticas que se incorporan a estas nuevas tendencias, al ofrecerle al paciente la posibilidad de tomar el medicamento una vez al día mejorando considerablemente la calidad de vida de las personas que padecen la enfermedad.
En sintonía con este nuevo enfoque GSK lanza Dolutegravir, cuyo nombre comercial es Tivicay®. El medicamento funciona como un inhibidor de la integrasa de 2° generación. En términos simples, la droga impide la inserción del material genético a las células sanas interrumpiendo el ciclo de replicación del virus. Está indicado para uso combinado con otros agentes antirretrovirales en adultos y adolescentes de 12 años o más.
“Procurar el bienestar del paciente es el foco de todo lo que hacemos en GSK. Este nuevo tratamiento es el resultado de un largo y arduo trabajo de investigación con el único objetivo de avanzar en la respuesta efectiva ante el VIH”, explicó el Doctor Aldo Navarro, Director Médico de GSK para América Central y Caribe.
Este antirretroviral recibió aprobación por la FDA en agosto de 2013, en Enero de 2014 para la Unión Europea por parte de la EMA y en Latinoamérica ha recibido aprobación en Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, México, Costa Rica, Panamá y ahora en República Dominicana.
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