El Boletín Demográfico y Social 2024 publicado por la Oficina Nacional y Estadística (ONE) revela cómo el envejecimiento de la población se ha convertido en un fenómeno de gran relevancia en la República Dominicana, presentando complejos desafíos sociales, económicos y de salud. Este proceso, que se intensifica con el aumento constante de la proporción de personas mayores, exige una respuesta coordinada y estratégica para enfrentar las implicaciones que acarrea.
La Ley No. 352 del país define como envejeciente a toda persona mayor de 65 años o, en algunos casos, a personas más jóvenes que experimenten cambios significativos debido al envejecimiento. Actualmente, este segmento de la población crece rápidamente, impulsado por el aumento de la esperanza de vida, gracias a mejoras en la atención médica, nutrición y condiciones de vida. Al mismo tiempo, factores como la baja tasa de natalidad y la emigración de jóvenes han acelerado este fenómeno, alterando la estructura demográfica del país.
Este cambio demográfico genera importantes retos para los sistemas de salud y seguridad social. El aumento en la demanda de servicios geriátricos, cuidados crónicos y centros especializados resalta la necesidad de una planificación adecuada para enfrentar este escenario. Asimismo, los sistemas de pensiones y seguridad social están bajo una presión significativa, lo que requiere reformas estructurales que aseguren su sostenibilidad financiera y una vida digna para los adultos mayores.
A nivel familiar y comunitario, el crecimiento de la población envejecida también conlleva desafíos. Las familias encargadas del cuidado de los ancianos enfrentan dificultades adicionales, lo que subraya la importancia de fortalecer las redes de apoyo social y comunitario.
En el ámbito laboral, la creciente población de adultos mayores abre una oportunidad para capitalizar su potencial, promoviendo el empleo a tiempo parcial y el voluntariado. Este cambio también tiene un impacto económico, modificando tanto la oferta laboral como la demanda de servicios y productos dirigidos a este grupo etario.
Ante este panorama, es fundamental que los sectores clave como la salud, la seguridad social y la planificación urbana trabajen en conjunto para mitigar los desafíos que plantea el envejecimiento poblacional y, al mismo tiempo, aprovechar las oportunidades que ofrece esta transición demográfica.
Este análisis demográfico aborda, entre otros temas, el acceso de los adultos mayores al internet, las muertes accidentales y la percepción de este segmento de la población sobre el cambio climático, destacando la importancia de preparar a la sociedad para enfrentar el envejecimiento de la población de manera integral y sostenible.
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