En respuesta al «FOMO» (miedo a perderse algo), ha surgido entre los jóvenes una tendencia contraria: el «JOMO» (joy of missing out), que celebra el placer de desconectarse de las redes sociales y liberarse de la presión social. Este nuevo enfoque promueve el autocuidado y la tranquilidad, permitiendo a los jóvenes priorizar su bienestar mental sin sentirse mal por no participar en todo.
El término ha ganado popularidad en medio del creciente uso de redes como TikTok e Instagram, plataformas donde muchos jóvenes pasan horas diarias consumiendo contenido. Según el informe «Nacer en la era digital: La generación de la IA» de Qustodio, los menores pasan un promedio de cuatro horas al día frente a pantallas, lo que ha generado preocupación por los efectos en la salud mental.
Emily Lawrenson, de Qustodio, señala que el «JOMO» puede ser una herramienta eficaz para aquellos que sienten dependencia tecnológica. La desactivación de notificaciones, la limitación del tiempo de uso y el filtrado de contenido son algunos consejos que pueden ayudar a los jóvenes a disfrutar de lo que realmente les gusta sin sentir la presión de estar siempre conectados.
Con este cambio, se espera que los jóvenes puedan encontrar un equilibrio más saludable con la tecnología, en un momento en que los gobiernos y las familias también comienzan a tomar medidas para regular el uso de dispositivos y redes sociales.
Fuente EFE.
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