Por Lic. Ana Amell, M. A. Psicología Clínica y de la Salud.
Cada 13 de enero se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, por este motivo es bueno recordar que la depresión es un trastorno mental que se caracteriza por un estado de ánimo persistentemente bajo, pérdida de interés o placer en las actividades cotidianas, y cambios en el funcionamiento físico y cognitivo. Es un trastorno común, que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) afecta a aproximadamente 280 millones de personas en todo el mundo.
La depresión puede manifestarse de múltiples formas, dependiendo de la persona y de la situación específica. Los síntomas de la depresión pueden variar de una persona a otra, pero los más comunes son:
- Estado de ánimo deprimido: La persona se siente triste, desanimada, desesperanzada o vacía.
- Pérdida de interés o placer: La persona pierde interés en las actividades que solía disfrutar.
- Cambios en el apetito o el sueño: La persona puede comer más o menos de lo normal, y puede tener problemas para dormir o dormir demasiado.
- Falta de energía: La persona se siente cansada o fatigada la mayor parte del tiempo.
- Problemas para pensar o concentrarse: La persona tiene problemas para concentrarse, tomar decisiones o recordar cosas.
- Sentimientos de culpa o inutilidad: La persona se siente culpable o inútil, y tiene pensamientos de muerte o suicidio.
Características de la depresión
La depresión puede tener un impacto significativo en la vida de una persona. Puede afectar a su salud física, su funcionamiento social y su capacidad para trabajar o estudiar.
La depresión puede causar problemas físicos, como dolores de cabeza, problemas digestivos, problemas cardiovasculares y aumento del riesgo de muerte por enfermedad cardíaca. También puede causar problemas sociales, como problemas en las relaciones, aislamiento social y pérdida de empleo. Y puede causar problemas cognitivos, como dificultad para pensar, concentrarse o tomar decisiones.
Tratamiento
El tratamiento de la depresión suele incluir una combinación de terapia y medicamentos.
La terapia puede ayudar a la persona a comprender su depresión y desarrollar habilidades para afrontarla. Los medicamentos pueden ayudar a mejorar los síntomas de la depresión, como el estado de ánimo deprimido, la pérdida de interés o placer y los problemas para dormir.
Recomendaciones
No hay una forma segura de prevenir la depresión, pero hay algunas rutinas que podemos realizar para reducir el riesgo, como:
- Cuidar de la salud física: Llevar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y dormir lo suficiente puede ayudar a reducir el riesgo de depresión.
- Desarrollar relaciones sociales sólidas: Las relaciones sociales positivas pueden proporcionar apoyo y ayuda en tiempos difíciles.
- Aprender a manejar el estrés: El estrés puede desencadenar o empeorar la depresión. Aprender a manejar el estrés de forma saludable puede ayudar a prevenir o tratar la depresión.
- Tener un propósito: Tener un propósito mantiene nuestra mente concentrada en lograr ese objetivo por ende nos mantiene motivados.
Si cree que puede estar deprimido, o alguien a su alrededor es importante buscar ayuda profesional. La depresión necesita ser atendida por un profesional. El tratamiento de la depresión puede ayudar a mejorar su estado de ánimo, su funcionamiento y su calidad de vida.
Ana Amell es licenciada en psicología por la Universidad Internacional de Valencia, cuenta con un Máster en Psicología Clínica y de la Salud, y una especialización en manejo de adicciones. Puedes contactar con ella en www.anaamell.com.
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