El moho puede crecer en casi cualquier superficie con humedad. Si hay moho en tu cepillo de dientes, descubre si es mejor tirarlo o limpiarlo y cómo evitar que se forme.
Imagina tomar tu cepillo de dientes y darte cuenta que tiene puntos negros, verdes o rosas que claramente no corresponden a residuos de pasta de dientes, ya sea en el mango o las cerdas, ¿qué harías?
El moho es una especie de hongo, organismos microscópicos que ayudan a la descomposición de la materia muerta y a reciclar los nutrientes en el medio ambiente. Estos se propagan a través de esporas por el aire, agua o insectos, las cuales crecen para formar moho en las condiciones apropiadas.
Es decir, para que pueda crecer y multiplicarse, el moho necesita suficiente humedad y materia orgánica, de acuerdo al Departamento de Salud del Estado de Nueva York en Estados Unidos.
¿Qué hacer si mi cepillo de dientes tiene moho?
Lo primero es identificarlo y, lo segundo, actuar. Si tu cepillo de dientes tiene moho, la recomendación general es tirarlo para prevenir daños a tu salud, en especial si se encuentra en las cerdas o cabeza. De estar en el mango, podrías limpiarlo si apenas está creciendo, pero al no saber si ya se esparció a las cerdas, mejor tirarlo.
El moho tiene la característica de poder ser visible o invisible, en especial cuando empieza a formarse; puede aparecer entre las cerdas y surcos, o en el mango si no se guarda correctamente. Sin embargo, en general suele verse como puntos negros o incluso una baba rosa, según señala el sitio Modern Dental Hygiene.
¿Por qué sale moho en el cepillo de dientes? La respuesta es sencilla, por no almacenarse correctamente, sin darle un flujo de aire adecuado, por ejemplo, si los guardas en un estuche o les pones el protector sin haberlo secado.
Pero también, si los colocas en un vaso o recipiente sin ventilación en el lavabo, pues el agua que puede caer del cepillo, se acumula y crea un caldo de cultivo para el moho y las bacterias
Pero si deseas eliminar el moho del recipiente donde guardas tus cepillos de dientes, estos son algunos consejos.
Vinagre, rocía la superficie con vinagre sin diluir, deja actuar un par de minutos y talla con un cepillo viejo. Limpia con un trapo humedecido con vinagre y deja secar perfectamente.
Bicarbonato y vinagre; mezcla ¼ de taza de agua tibia con ¾ de taza de vinagre blanco y 2 cucharadas de bicarbonato. Agita bien y aplica sobre las zonas con moho, deja actuar y frota con un cepillo viejo. Enjuaga y deja secar perfectamente.
Agua oxigenada; rocía agua oxigenada sobre la superficie con moho, deja actuar 10 minutos y talla. Enjuaga y seca perfectamente.
Cloro. El infalible, sólo rocía o deja remojando el vaso en una solución de 1 parte de cloro por 4 de agua, talla y seca perfectamente.
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