Las técnicas modernas en odontología infantil están transformando la experiencia de los niños en el dentista, haciéndola más cómoda y eliminando el temor tradicional. Según la especialista en Odontopediatría, Dra. Ana Carla Robatto, estas innovaciones no solo facilitan el tratamiento, sino que también fomentan hábitos saludables desde temprana edad, clave para prevenir problemas como caries y enfermedades gingivales.
Uno de los avances destacados es el Protocolo GBT (Terapia Guiada de Biofilm), que utiliza un chorro de agua tibia y un polvo no abrasivo para limpiar profundamente los dientes sin causar dolor ni el típico ruido de los equipos odontológicos. “Este método permite una experiencia cómoda y sin miedos para los niños, haciendo que la visita al dentista sea amigable y eficaz”, explicó Robatto.
Además, el enfoque del GBT enfatiza la enseñanza de hábitos de higiene bucal, motivando a los pequeños a cuidar sus dientes y manteniendo una salud bucal óptima. Esta técnica, junto con recomendaciones creativas cómo convertir el cepillado en un momento divertido y familiar, ayuda a establecer una relación positiva con el cuidado dental.
Por otra parte, una dieta saludable también juega un papel fundamental. La Sociedad Brasileña de Pediatría (SBP) recomienda evitar azúcares añadidos en niños menores de dos años, promoviendo una alimentación rica en frutas, verduras y cereales integrales para proteger los dientes desde la infancia.
Incorporar estos hábitos y enfoques desde edades tempranas no solo asegura una buena salud bucal, sino que también mejora la autoestima y las interacciones sociales de los niños, preparándolos para una vida de bienestar integral.
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