La Sociedad Dominicana de Pediatría (SDP) alertó sobre el creciente uso de sustancias para mejorar el rendimiento deportivo en niños, una práctica que está generando preocupación entre los especialistas debido a sus graves consecuencias para la salud de los menores.
Según la SDP, cada vez más padres, preocupados por que sus hijos triunfen, buscan mejorar su rendimiento. Sin embargo, el uso de hormonas de crecimiento y otras sustancias prohibidas ponen en riesgo la salud de los jóvenes, ya que pueden causar daños irreversibles en el organismo en desarrollo.
“Es común ver en nuestras consultas padres buscando información antes de usar sustancias que por lo general son indicadas o informadas por los entrenadores, pero no todos llegan con la intranquilidad, sino que la mayoría vienen con el susto por los síntomas que presentan sus hijos luego del uso de estos medicamentos después de haber transcurrido meses de uso”, afirmó.
Los especialistas advierten sobre el uso de esteroides anabólicos, sustancias similares a la testosterona que, aunque tienen aplicaciones médicas específicas, pueden tener consecuencias devastadoras en los jóvenes cuando se utilizan sin prescripción médica. Entre las graves repercusiones del consumo de estos esteroides se incluyen:
- Crecimiento detenido: Los esteroides pueden acelerar la pubertad y detener el crecimiento óseo, impidiendo que los niños alcancen su estatura máxima.
- Daño a órganos vitales: Estos productos pueden dañar órganos como los testículos, los riñones y el corazón, aumentando el riesgo de enfermedades graves, como infartos.
- Problemas de conducta: El uso de estos productos puede causar cambios en el comportamiento como son agresividad, dificultades para aprender y problemas para relacionarse con los demás.
Ante este alarmante panorama, la sociedad especializada hace un llamado a la acción y ofrece varias recomendaciones:
- Informarse: Los padres deben hablar con su pediatra sobre los riesgos del uso de sustancias en el deporte y buscar información confiable sobre el tema.
- Elegir entrenadores responsables: Se debe priorizar a aquellos entrenadores que promuevan la salud y el bienestar de los niños, rechazando cualquier práctica que ponga en riesgo su desarrollo.
- Promover el deporte saludable: Fomentar la práctica de deportes de manera segura y divertida, sin recurrir a sustancias peligrosas
Además destaca la importancia de que padres comprendan los riesgos asociados al uso de estas sustancias en niños con un firme llamado a la conciencia, instando a todos a proteger a nuestros hijos y evitar que la presión por el éxito deportivo los lleve a tomar decisiones que pongan en peligro su salud.
«Como padres no permitamos que el deseo de verlos triunfar nos lleve a poner en riesgo su salud. El deporte debe ser sinónimo de salud y diversión», concluye.
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