Es más probable que el uso del medicamento inmunosupresor metotrexato para tratar la psoriasis y la artritis psoriásica provoque complicaciones hepáticas graves que el uso del mismo medicamento para tratar la artritis reumatoide, según una investigación de la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania. Ese hallazgo siguió siendo cierto incluso cuando se controlan otros factores de riesgo de enfermedad hepática, como la obesidad y el consumo de alcohol.
Los investigadores de Penn sugieren que los médicos controlen de cerca la salud y la condición hepática de sus pacientes que toman metotrexato para el tratamiento de la psoriasis y la artritis psoriásica. Los resultados del estudio se publican en la Revista de la Asociación Estadounidense de Dermatología .
El metotrexato, un medicamento que se administra comúnmente a pacientes con cáncer en dosis altas, también se prescribe en dosis mucho más pequeñas a personas con enfermedades psoriásicas o artritis reumatoide. En esas dosis bajas, es antiinflamatorio y puede disminuir los síntomas de las afecciones de la piel y las articulaciones. Es relativamente económico en comparación con otros medicamentos que pueden controlar las enfermedades. Sin embargo, el metotrexato puede producir muchos efectos secundarios no deseados y puede alterar las células del hígado , provocando daño hepático y cirrosis.
Después de evaluar 20 años de datos de miles de personas con psoriasis, artritis psoriásica y / o artritis reumatoide que también estaban tomando metotrexato, los investigadores observaron que las tasas de cirrosis y daño hepático eran más altas en los usuarios de metotrexato con psoriasis o artritis psoriásica en comparación con el metotrexato. usuarios con artritis reumatoide. Las mayores tasas de enfermedad hepática provienen del grupo de psoriasis.
«No estamos seguros de por qué las personas con psoriasis y artritis psoriásica tengan mayores tasas de enfermedad hepática cuando toman metotrexato», ha indicado el autor principal Joel M Gelfand, profesor de Dermatología y Epidemiología en Penn. «Las tres condiciones causan inflamación que prepara el escenario para un posible daño hepático. Pero se presume que existe un «hígado psoriásico», lo que significa que la psoriasis de alguna manera promueve cambios grasos en el hígado que pueden conducir a un mayor riesgo de complicaciones hepáticas cuando tomando medicamentos que también causan daño hepático, como el metotrexato .
Los especialistas deben aprovechar las pruebas de ultrasonido especializadas
Antes de este estudio, había estudios más pequeños con hallazgos que sugerían que el daño hepático era un posible resultado del uso de metotrexato, pero estaban incompletos debido a problemas como depender de las pruebas de laboratorio y otras medidas de la función hepática, que podrían ser susceptibles a sesgos de prueba, en lugar de que resultados verdaderamente significativos. En cambio, los investigadores de Penn utilizaron una base de datos nacional danesa para evaluar simplemente la frecuencia con la que se producía daño hepático en personas con estas afecciones que también tomaban metotrexato.
«Nuestro equipo alienta a los médicos y pacientes a considerar todos los tratamientos disponibles para la psoriasis y la artritis psoriásica «, ha indicado Gelfand. «Y si se usa metotrexato, los médicos deben monitorear cuidadosa y regularmente la salud y función hepática de sus pacientes y aprovechar la sangre nueva y las pruebas de ultrasonido especializadas que pueden detectar daño hepático en una etapa temprana para evitar que los pacientes desarrollen problemas hepáticos clínicamente significativos».
Los hallazgos del equipo también resuenan en un momento en que hay un mayor enfoque en las disparidades de salud existentes. Los altos costes de los medicamentos con menos efectos secundarios podrían llevar a algunas personas a elegir en última instancia un medicamento más asequible con más posibles efectos secundarios.
«Es preferible tener una amplia gama de opciones farmacéuticas o de tratamiento para los pacientes porque cada paciente es único y puede tener otras afecciones que deben controlar o tener factores de estilo de vida, como intentar concebir un hijo, lo que significaría que un medicamento sobre otro es una mejor opción», ha indicado Gelfand. «Sin embargo, la comunidad médica debe estar consciente de los factores, como el costo, que disuaden a un paciente o proveedor de recetar un tratamiento que realmente se adapte mejor a las necesidades del paciente.
Fuente: Redacción Médica
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