SANTO DOMINGO.-En los últimos meses la mortalidad materna ha experimentado un aumento alarmante, marcado por las complicaciones que trajo la pandemia de la COVID-19.
Según explicó a este medio el doctor César López, presidente de la Sociedad Dominicana de Obstetricia y Ginecología (SDOG), el 25 por ciento de los embarazos que se complican corresponden a adolescentes y la mortalidad es alta.
“Los especialistas estamos preocupados por el aumento de embarazos en adolescentes y mortalidad materna en el último año”, dijo el doctor y agregó que actualmente el país tiene una tasa de mortalidad materna de 157 por cada 100 mil nacidos, cifras parecidas a las de hace 20 años.
Expresó que la falta de seguimiento durante la pandemia ha contribuido con este aumento de mortalidad.
Para contrarrestar esta situación, la SDOG en conjunto con la Sociedad Dominicana de Medicina Perinatal, Sociedad Dominicana de Pediatría y el Colegio Dominicano de Psicólogos, presentaron una serie de propuestas al Ministerio de Salud Pública, que incluyen la educación de los niños y sus familias para prevenir el embarazo en adolescentes, que el Estado garantice la suplementación de hierro a las embarazadas y que sean incluidas en los programas de nutrición que están llevando las autoridades.
Asimismo se contempla la capacitación práctica de los médicos familiares y especialistas, a fin de que las embarazadas sean referidas desde las Unidades de Atención Primaria antes de que se compliquen y que se pueda ofrecer un buen manejo de las causas de mortalidad como la hipertensión, hemorragias, infecciones y anemia.
El doctor Vargas explicó que ya se inició un proceso de capacitación de médicos residentes en el Hospital Estrella Ureña mientras que el 2 de octubre se capacitará a 100 médicos de atención primaria y ginecobstetras en San Juan de la Maguana. Además se prevé extender las capacitaciones a todo el país.
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