La República Dominicana lidera en el mundo las listas de muertes por accidentes de tránsito, donde cada año mueren 67 dominicanos por esta causa, lo que se traduce a ocho cada día. Los accidentes de tránsito son responsables de una gran parte de los neurotraumas, es decir, traumas cerebrales y lesiones en la columna vertebral que afectan la médula espinal.
De acuerdo al doctor Franly Vásquez, neurocirujano traumatólogo, en países de ingresos medianos y bajos, aproximadamente el 80% de estos traumas ocurren como consecuencia de accidentes viales. Sin embargo, a pesar de la magnitud del problema, solo el 18% de la investigación sobre estos traumas proviene de estos países.
Explicó que la mayoría de los estudios y protocolos de tratamiento provienen de regiones como Estados Unidos, Canadá, Europa, Australia y Japón, lo que genera un desafío significativo en la implementación de soluciones adaptadas a la realidad dominicana.
Durante su conferencia magistral titulada "Avances en el Neurotrauma", disertada en el marco de la Semana TraumaRD, el doctor Vásquez reiteró que la falta de una base de datos confiable y la limitada investigación en estos países dificultan el diseño de políticas de salud pública más efectivas y personalizadas.
Resaltó que estas lesiones no solo diezman el presupuesto de salud pública, sino que también afectan a las familias que deben hacerse cargo de un paciente que, en muchos casos, no puede reintegrarse a su vida laboral y social, ya que queda con secuelas neurológicas y cognitivas importantes, que pueden ser desde leves hasta severas.
Entre las secuelas más comunes se encuentran la incapacidad para prestar atención después de un trauma craneoencefálico, la dificultad para concentrarse y problemas con la memoria ejecutiva. En los casos más graves, el paciente puede quedar en un estado vegetativo persistente, en el cual no habla, no responde y no se relaciona con el entorno.
El especialista explicó que el neurotrauma en República Dominicana enfrenta graves desafíos debido a la falta de infraestructura y la insuficiencia de centros especializados en el tratamiento de emergencias neurológicas. En este sentido, señaló que en regiones alejadas del país, especialmente en el sur, existe una escasez crítica de hospitales equipados con los recursos necesarios para tratar urgencias como hematomas intracraneales, lo que representa un serio riesgo para los pacientes.
Enfatizó que estos traumatismos requieren una intervención rápida, idealmente dentro de las primeras cuatro horas, para evitar complicaciones graves. Sin embargo, la distancia de muchas zonas rurales a los centros de trauma más cercanos dificulta este acceso, agravando aún más la situación de los afectados.
La urgencia de establecer protocolos nacionales claros
El doctor Vásquez resaltó que, en República Dominicana, la falta de protocolos nacionales claros para el manejo de neurotrauma representa uno de los mayores desafíos en la atención de pacientes con lesiones cerebrales. A diferencia de otras emergencias médicas, como los infartos, donde el sistema de respuesta rápida está más estructurado, en casos de trauma craneoencefálico el diagnóstico y tratamiento suelen depender de la clínica y no de una metodología objetiva estandarizada.
En este sentido, explicó que la situación es crítica debido a que no existe en el país un protocolo que permita monitorear de manera constante los elementos dentro del cráneo —el cerebro, la sangre y el líquido cefalorraquídeo— que deben mantenerse en equilibrio para evitar el deterioro.
Narró que, en la práctica, el deterioro clínico se detecta tarde, cuando el paciente ya presenta síntomas graves. Este retraso en la intervención no solo aumenta la mortalidad, sino que también pone en riesgo la calidad de vida de los pacientes.
En este contexto, el especialista enfatizó la necesidad urgente de crear un protocolo nacional adaptado a la realidad del país, que considere tanto los recursos disponibles como las mejores prácticas basadas en la evidencia, para mejorar la respuesta ante el neurotrauma y reducir las secuelas graves, asegurando una atención más eficiente y oportuna.
Retos para el desarrollo de un programa nacional de trauma
El doctor Vásquez manifestó que el desarrollo de un programa nacional enfocado en la atención integral del trauma en República Dominicana enfrenta varios retos importantes. El primero y más crucial es la voluntad política del gobierno, que debe comprometerse a crear un sistema integral de manejo del trauma.
Otro reto significativo es la falta de empatía por parte de la sociedad, lo que dificulta la implementación de un enfoque efectivo para la atención del trauma. En este orden, consideró necesario que el sistema educativo nacional incluya la educación vial como una asignatura obligatoria, enseñando a los estudiantes las pautas para salvar vidas en caso de accidentes.
Finalmente, un desafío importante es la fuga de profesionales capacitados en trauma hacia especialidades más rentables, debido a la falta de incentivos económicos en el área del trauma.
Para ver la conferencia completa, puede acceder aquí.
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